En el que los
Cristianos
por su fe
perseguidos
no sean vencidos
y sientan
nuestras manos.
Donde la fe de
vida
llevada por los
misioneros
sea el inicio
sincero
de una esperanza
renacida.
Donde siga el
sentimiento
en las caritas
parroquiales
que son el sustento
que evita muchos
males.
Donde la fe
ilumine
con una gran
devoción
al que camine
ayudando con
devoción.
En el que los
mayores
no sientan la
soledad,
en el que las
flores
lleven nombre de
caridad.
Donde los
enfermos puedan sentir
el cariño tan
necesario,
para que lo que
tengamos que vivir
sea algo bien
extraordinario.
Feliz entrada de 2019
Texto Jara