Desde su Plaza, Rincón con encanto

 

En la Torre Parroquial

a duelo repica la campana.

Así es desde tiempo inmemorial

el Día de Santa Ana.

 

Homenaje a los difuntos

de la peste medieval.

La Villa, en su conjunto,

hace procesión reverencial.

 

Está presente el luto

durante mitad del recorrido.

A los ausentes tributo

de un pueblo agradecido.

 

La Madre de María, Patrona,

de la Cabeza del Marquesado.

Que es su protectora se pregona,

desde su plaza, rincón encantado.

 

Bendita es Santa Ana,

Excelsa patrona de Gibraleón.

Protege a la Villa Panturrana

ofreciendo tu bendición.

Texto y Foto; JanRoc

 

Faro y Vigía del Odiel

 

La Virgen de la Angorilla

volvió tras su restauración.

Ella es Estrella que brilla

en el Viejo Gibraleón.

 

Talla del Siglo de Oro,

Reina del Monte Carmelo.

En Santiago hay un Tesoro,

Ella es Capitana del Cielo.

 

La del Santo Escapulario,

la Madre de Dios Bendita.

Su rostro es extraordinario

y tiene belleza infinita.

 

Llega un buen momento,

para darle su lugar,

con devoción y sentimiento

que una el Río y la Mar.

 

Faro y Vigía del Odiel

que nos cubre bajo su manto

y cuida al marinero más fiel

con una mirada de encanto.

Texto y Foto; JanRoc

Galería Fotográfica. Virgen del Carmen, Parroquia de Santiago, Gibraleón.

 

Tu Puerto es Segura Fortaleza

 

Dios te Salve María

Virgen de Gracia llena.

Bendita entre las mujeres

tu Puerto es Segura Fortaleza.

Bendito es Nuestro Capitán

Fruto Bendito de tu vientre.

Santa María, Madre de Dios,

ruega por nosotros,

navegantes del Odiel,

ahora y en la hora

de nuestra partida, Amén.

Texto y Foto; JanRoc

Salve Virgen del Carmen. Protectora de la Angorilla.

 

Dios te salve Reina y Madre,

de la Angorilla Protectora.

Nuestra Esperanza, Vida y Dulzura,

Nuestra Celestial Comodora.

 

Dios te Salve. A ti suspiramos

en esta nuestra travesía.

A tu Santo Escapulario imploramos

con la nueva luz del día.

 

Vuelve tus ojos misericordiosos

hacia las aguas del Odiel.

Muestra a Jesús, el Almirante,

tú Tripulante más Fiel.

 

¡ Oh clementísima, oh piadosa ¡

Puerto seguro de aguas fluviales.

Sé siempre misericordiosa

y protégenos en las tempestades.

 

Ruega por Gibraleón, Dulce Virgen Navegante.

 Cúbrenos bajo tú manto de amor

para algún día poder llegar

al embarcadero celestial de Nuestro Señor.

 

Amén

Texto e Imagen: JanRoc