Oh glorioso Patriarca, San José,
a Vos vengo para veneraros de corazón
como al más fiel esposo de la madre de Dios,
como cabeza de la familia más santa,
como padre nutricio del Hijo de Dios,
y como el leal depositario
de los tesoros de la Santísima Trinidad.
En vuestra persona honro
la elección del Padre
que quiso compartir con Vos
la autoridad sobre su Unigénito Hijo;
venero la elección del Hijo divino
quien quería obedeceros y recibir
su sustento ganado por el trabajo
de vuestras manos;
la elección del Espíritu Santo,
quien os confió su castísima esposa.
Os ensalzo porque habéis llevado
en vuestras manos al Niño Dios,
estrechándole a vuestro pecho,
transportado de alegría.
No hay comentarios:
Publicar un comentario