Padre Nuestro que estás en el Cielo,
bendice Señor el Panturrano Suelo.
Tu nombre es santificado
por tu rebaño olontense amado.
Venga tu Reino a Gibraleón
pueblo que te adora con devoción.
Hágase tu voluntad, Misericordioso,
en esta Tierra y Cielo Glorioso.
Ofrécenos el pan de cada día
y llénanos de tu alegría.
Oh inmenso Crucificado
que perdonas nuestros pecados
y a perdonar nos has enseñado.
Evítanos en tentación caer,
cuídanos con tu querer
y que tu Sangre, Rey Celestial,
libre a tu pueblo del mal.
Texto Jara
Foto Jara
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