Noche de la
Asunción,
triste está la
Estrella,
de nuevo sin
procesión
de la Virgen de
la Bella.
Sin cortejo
procesional
en las calles
léperas,
abierto el templo
parroquial
para las
plegarias sinceras.
Sin música, sin costaleros,
sin velas de
promesas,
ojalá el año
venidero
ese amor que Lepe
le profesa.
Pero de nuevo la
función
del Pueblo a su
Señora,
de nuevo la
devoción
a su Celestial
Mediadora.
Volverá esa noche
de verano,
de Lepe con su
Patrona,
volverá el Sueño
Mariano
que la noche
corona.
Texto JanRoc
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