Podría ser la respuesta perfecta para la pregunta del
significado de los términos fe y devoción,el traslado de la Virgen del Rocío
cada siete años a Almonte es un acto de fe y devoción,aquí no hay trajes de
flamencas,aquí no hay grandes gastes,todo es muy sencillo,las mulas cargadas
con los costos para el camino en los cerones,la gente caminando en torno a la
Madre de Dios con sus varas,las oraciones,los vivas,las salvas de los trabucos.
Una fe que se demuestras en una arena y en unos pinares,que
no dormirán por una noche ya que por los parajes que recorre el Camino de los
Llanos pasan esa noche cientos de miles de personas.
Un camino diferente ya que no es el Camino de un simpecado
es la propia Virgen la que hace el Camino para estar durante nueve meses
aproximadamente en su pueblo,engalanado para tan magna ocasión.
En el Camino de los Llanos a la Luz de las estrellas han
quedado las Sevillanas,las peticiones y los rezos que han venido hasta el
Chaparral con Ella,una protestación de fe y devoción que se hace grande una
noche cada siete años.
Da igual el polvo que se levante,da igual la arena que los
zapatos reciban y lo duro que sea el camino,la gente la acompaña a Ella,se le
tiene muy cerca aunque sea bajo su capa de peregrina que la protege de esas
arenas que pisa.
Todo es devoción,todo es ilusión y sacrificio para que una
vez más se cumpla lo estipulado,la Virgen llegará entre un mar de personas al
Chaparral,allí será entronizada en el altar efímero y allí las camaristas le
quitaran primero la Capa y conforme se vaya acercando el amanecer del nuevo día
su rostro será desvelado,se le quitará el pañito,entonces Almonte la llevará
poquito a poco hacía la Iglesia de la
Asunción donde una catedral de madera y papel la recibir, antes de que entre en
la que será su casa durante los próximos nueve meses.
El camino soñado,una noche diferente entre los pinares y las
arenas de Doñana,la Virgen tras siete años ya está en su pueblo,en el recuerdo
la devoción que se ha ido derramando por el camino,la devoción que hace que la
Virgen del Rocío sea universalmente conocida,una devoción que aún dejando atrás
la ermita y la marisma la traslada por un camino de fe en una hermosa noche de
agosto.
Foto Jara
Texto Jara
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