miércoles, 16 de octubre de 2013

Un perfil conocido (VI). De San Jacinto a la Plaza Nueva






La Casa Grande Franciscana de Sevilla era uno de los Grandes Conjuntos Conventuales de la Ciudad. Tanto su extensión como en la valía de las joyas artísticas que dicha Casa Grande  de los Franciscanos custodiaba.

La Invasión Francesa y la Desamortización de Mendizábal hicieron que la inmensa mayoría de los Conventos de la Ciudad pasaran a tener otra función distinta a la que fueron concebidos.
Hoy en día en los terrenos de la Casa Grande en la Casa Nueva sigue existiendo parte de la Casa Grande el Ayuntamiento fue parte del Conjunto Conventual, pero además y lejos de recorridos a pesar de estar en el Centro hay en la Plaza Nueva un edificio que perteneció a la Casa Grande y que hoy sigue teniendo funciones religiosas, la Capilla de San Onofre, capilla en la que se realiza la Adoración Permanente al Santísimo.

Esta pequeña capilla esconde en su altar imágenes de gran valía cercanas al círculo de Roldán,pero entre todas las tallas de magnifica realización una es la que más llama la atención a la vista del Cofrade.

Nos referimos a la hermosísima Inmaculada que se encuentra tras el Santísimo, la peculiaridad de esta talla es que la Virgen tiene los mismos rasgos que la Dolorosa de San Jacinto, el rostro de la Imagen nos hace evocar el rostro de la Estrella de Triana y atendiendo a que la inmensa mayoría de las obras que se encuentran en San Onofre son del círculo de Roldán nos hace pensar que tras la realización de la Inmaculada se encuentra la Gubia de La Roldana.

Invitamos a ver estas dos imágenes y como siempre invitamos a que visiten los templos de la Ciudad, en este caso invitamos a estar un rato orando ante el Santísimo y que tras la oración  comprueben las maravillas que tiene la pequeña capilla, especialmente la talla de la Inmaculada.



 Dedicado a Estrella Sánchez Medrano

Fotos Manuel Antonio Rodríguez Madrigal

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